El sacerdote no es alguien que simplemente enseña cosas sobre Dios sino que las vive. Es preciso, por tanto, que el seminarista dentro de su formación crezca en unión y amor a Dios a través de una vida que transparenta al mismo Cristo, siendo otro Cristo.
Bienvenida de José Antonio Bande García, rector del Seminario
«Toda la educación de los seminaristas debe tender a la formación de verdaderos pastores de almas a ejemplo de Nuestro Señor Jesucristo, Maestro, Sacerdote y Pastor. La formación de pastor es, por tanto, la finalidad y el objetivo fundamental de los Seminarios Mayores.»
(Plan de Formación para los seminarios mayores. Conferencia Episcopal Española, 16)